El cóndor (Vultur gryphus) es un ave de gran porte de color negro, con alas largas y anchas y detalles blancos en ellas. Puede llegar a pesar entre 11 y 15 kilos. Posee un collar de plumas blanco, y su cabeza y cuello están desnudos.

 

Esta especie presenta dimorfismo sexual, es decir que el macho y la hembra son diferentes: el macho posee una cresta carnosa desde la base del pico hasta arriba de la cabeza, y el iris del ojo es marrón; mientras que la hembra es menor, tiene los ojos rojos y carece de cresta y papada.

 

Habita principalmente en ambientes de altura a lo largo de la Cordillera de los Andes, incluyendo los picos más altos. Frecuenta pastizales abiertos. Suele sobrevolar bosques aunque no desciende en sitios donde no hay vegetación arbórea.

 

El cóndor aprovecha las corrientes de viento para volar. Para controlar la dirección en el vuelo, regula la cantidad de aire que pasa entre las plumas, cerrando o abriéndolas, siendo capaz de planear por más de 5 km.

 

Se alimenta principalmente de carroña. En la actualidad se alimenta principalmente de restos de ovejas, cabras y liebres, aunque en algunos sitios donde la ganadería no está presente se alimenta de carcasas de guanaco que fueron cazados previamente por especies cazadoras. En el Onashaga también frecuenta colonias de aves y mamíferos marinos.

 

En este punto podemos ver hacia la izquierda un gran paredón, lugar donde habitan y se ven sobrevolar ejemplares de esta especie.

 

SABIAS QUE? En la cabeza y el cuello no tiene plumas. Esto se debe a que se ha adaptado a lo largo de los años para no desarrollarlas y así, evitar tener que limpiarlas de la sangre de sus presas, característica que comparte con otros buitres. 

 

 

Textos: Tec. en Turismo Marisol Martinez
Revisión: Mag. María Laura Borla
Fotografía: Abel Sberna